Resulta frustrante que no pueda gritar ni insultar
a mis cercanos. Estoy paralizado. Me obligo a hacer todas las tareas que me
corresponden sin dejar un remanso para mi alivio. Recargo las energías
necesarias para no desfallecer y sigo a pesar de la fatiga y el decaimiento.
Atrapado en una actitud correcta me vuelvo rígido y silencioso. Quebradizo. No
tengo libertad para ser.
Lo que alcanzo a percibir de la naturaleza humana
en los actos de las gentes que me circundan me entristece muy hondo. La mayoría
de sus palabras son huecas, livianas, en contravía de la virtud. Sus vidas son
la acumulación de rutinas torpes sin pausa para depurarse.
Yo estoy contaminado de esa forma de existir. Soy
también miembro de esa horda estrambótica irracional. Caemos. Engullimos el
tiempo. Casi luzco normal aunque se notan mis desajustes. En realidad nos
permitimos ser así de absurdos y nauseabundos. Nos alzamos de hombros ante las
ruinas que fabricamos.
Algunos desesperados manotean tratando de zafarse
de la maraña de hilos con que están amarrados a su miseria. Otros inventan
nuevos rituales con la intención de distraer las desgracias y alcanzar la
calma. Los triunfos son esporádicos y de corta duración. Los ilusos siguen en
la búsqueda. La renuncia valiente tampoco ha hecho mella en la esencia que nos
sostiene. La estupidez se reproduce infaliblemente. Nuestra historia es
defectuosa. Fuimos mal inventados.
Sobrio, a la par que triste, retrato social. Somos masa: deforme, previsible, manejable y egoísta. Vivimos la primacía del culto al yo. Ya lo decía Quevedo: "Ande yo caliente y ríase la gente", y ya ha llovido desde entonces, pero la cosa no ha cambiado demasiado. Saludos.
ResponderEliminarMucha realidad aporta este texto que nos ofreces.
ResponderEliminarSaludo cordial
Fina
muy pesimista te veo....fija tu atención en las cosas gratas y desecha las ingratas, es la única forma de tirar p'alante....
ResponderEliminarSí, me pregunto quien inventó esta farsa.
ResponderEliminarBesos
¿y qué podemos hacer?
ResponderEliminarBesos.
Anuar, recuerdo una devolución tuya a un post mío hace bastante tiempo atrás, mi relato era sobre una persona que sufría todo esto en su entorno más cercano, un abrazo grande!
ResponderEliminarBuena reflexión, espero que sea una llamada a la rebelión.
ResponderEliminarEl hombre fue dotado con la razón, tiene la capacidad de pensar, es inteligente. Muy cierto cuando describes ése entorno, pienso que el hombre tiene la gran capacidad de elegir. Le diría a tu protagonista,...a desempolvarse, elegir y seguir caminando. Besi.
ResponderEliminarCasi luzco normal aunque se notan mis desajustes.
ResponderEliminarMe encantó
Saludos.
ES la especie humana que se ve hoy. Nada la diferencia, sentadas en sus escritorios de trabajo ante la fijación de un computador, en un salón, similar a la ruindad de unas vacas que solo saben pastar y comer. Aprecio esa facultad suya, para hABLAR EN SUs relatos desde la primera persona, que le da credulidad a la historia. Un <brazo. Carlos
ResponderEliminarA veces por circunstancias hay nudos imposibles de desanudar, intentaremos al menos aflojarlos y sobrellevar lo que tan atados nos tiene sometidos...
ResponderEliminarBesos, anuar.
Hola. Muy profundo lo que has escrito. Seguimos la marea que la sociedad nos ha marcado. No es que estemos mal inventados, es que hay que seguir el patrón que marca la sociedad y como nuestros progenitores también lo siguen, nos lo transmiten a nosotros. Nos educan en sus creencias.Si no se sigue esta marea, pues o estas loco, o no perteneces a este mundo. Así es lo que nos ha tocado vivir. Y así es como casi todos vivimos. Tal vez haya algunas personas que no sigan la marea y estén aislad@s y sean felices de verdad, no una felicidad superflua.
ResponderEliminarSaludos
No tenemos sangre.
ResponderEliminarY además las cámaras nos vigilan.
Yo no diría realista, sino nihilista. No es como esas sentencias que afirman negando, no. A veces pensamos que porque es común es superfluo, pero ¿porqué tiene que ser así? la vida humana en interacción con este mundo no es en blanco y negro, tiene infinidad de tonalidades, saber descubrirlas es lo bueno.
ResponderEliminarSaludos.
yo estoy pasando las de caín... ocultando una vida que quisiera tener y me han negado, mientras vivo una vida impuesta....
ResponderEliminarsolo nos queda dos opciones: una tirar por la calle del medio y mandarlo todo a la mierda, o bien, la opción que estamos adoptando: el resistir el pasar de los días....
besos.
Estremecedor texto relatando la estremecedora realidad de la mayoría de nosotros...No creo que sea que hemos sido mal inventado...creo que se trata más bien un mal uso...
ResponderEliminarMuy bien describes la "rabia" pero no es algo constante y seguirdo, de otro modo nos volveríamos locos.
ResponderEliminarTambien entre medio algunos momentos de calma llegan y mitigan ese dolor o frustración.
Nadie nos dijo que la vida sería un camino de rosas.
Un abrazo.
Ambar
Creo que todos estamos un poquito contaminados, pues uno es uno con su medio ambiente. El tema es como lo influenciamos antes de que nos influencie. Te sigo.
ResponderEliminarTremendo texto, lamentable realidad. Beso
ResponderEliminarMucha realidad en pocas palabras,excelente texto. Me alegro de haber oido de tu blog Anuar.
ResponderEliminarComo aporte, pienso que no fuimos mal inventados, más bien nosotros inventamos mal lo que llamamos sociedad.
Saludos.