domingo, 17 de abril de 2011

Náufrago En La Ciudad 4.


El periplo es idéntico. El último diseño aplicado a la ciudad hizo de la avenida una lombriz curvilínea que se retuerce sin moverse. Este sistema de buses, apodado Gusanos Azules, es un vagón que me acoge en su zumbido automático, aire frío y paradas programadas. Nadie podría saltar al vacío a destiempo. Lo vivo es la carne que transportan, nosotros. Gentes que entiendo como ejemplares de algo que no evoluciona. Un hombre corpulento degolló a su mujer en este mismo vagón hace un par de días. Razones de la pasión, dijeron. Cerca, un grupo de muchachos habla un dialecto veloz y efímero que me salpica de ignorancia. Una jovencita hermosa, escuálida, concentrada en imitar al vampiro de moda que vio en una película, se esfuerza por parecer gaseosa desde su fisonomía compacta. Bajo sus ropas palpita una hembra biche de piel magullada por la nocturna. Sin cerrar los ojos veo mis manos recorrer palmo a palmo su cuerpo húmedo y rosado. Son las 4:15 de la tarde. Llueve sin misericordia. Sólo se ve un sarpullido de agua en el parabrisas. Otra certeza acaba de morir en mi cabeza. El amor tampoco es un dueto afinado. Sigo. Igual, sé que una mujer me espera al final de la ruta en la Librería Olvido.

7 comentarios:

  1. Así da gusto viajar (con tus palabras rondando el aire).

    Un beso o 2 *

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  2. "Sarpullido de agua en el parabrisas", me gustó mucho la imagen.

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  3. Aun cuando hacés prosa, hacés poemas, tienen música de fondo y nostalgias.

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  5. ¡Qué librería más bonita para encontrarse! Cuando dos personas se encuentran en el olvido, se recuerdan por largo tiempo.

    Un beso,

    Andri

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  6. Yo soy muy observadora de lo que me rodea también.
    Bicos grandes y lindo escrito.

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  7. Me gustó el gusano azul, tal como lo llaman. Se ve confortable, claro no quisiera estar en el lugar de la mujer que la mató el hombre corpulento. Muy buena foto, muy buen escrito.
    Te sigo leyendo.
    Besosssssssssssssssssssssssss

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