domingo, 8 de mayo de 2011

Anfitrión 1.

Tocaré tu cuerpo,
mis manos
bajarán por tu abdomen
peldaño a peldaño,
dejaré en tu piel retazos de caricias,
rodaré por ti como aceite de luna.
Seré una ciega adivinando
las coordenadas de tu ingle,
las diagonales que marcan el sitio
de tu mástil invencible,
columna de carne hirviendo,
árbol que crece vertiginosamente,
cíclope alado,
rey de tu entrepierna,
eje de mi ensamblaje.

Frotaré tu cilindro
hasta obtener su lava blanca.
Amado,
dame a beber tu espeso elixir,
calma este antojo de absorber tu néctar.
Tu miembro se aviva dentro de mí,
Soy funda para tu daga envenenada
forro húmedo
aro de cobre.

Oh Amado,
Ven aquí donde mi alma anida,
puebla mis entrañas
con tu legión de soldados blancos.


.

6 comentarios:

  1. Perfecta la manera en que éste y el texto anterior se acoplan. Perfecta.

    ResponderEliminar
  2. Coincido con Elena.
    Anuar; luego dices que exagero cuando digo loque digo...

    Un beso o 2 ***

    ResponderEliminar
  3. La respuesta perfecta.
    Felicitaciones.

    ResponderEliminar
  4. Definitivamente para leer esto se necesita valor, mucho valor para no desear la realización de esas acciones.

    ¡Hermoso!

    Saludos Cordiales*

    ResponderEliminar
  5. CREO QUE ERES ... MUY BUENO PARA ESCRIBIR, ME HE QUEDADO SIN PALABRAS, SOLO DECIRTE, PERFECTO


    UN ABRAZO DE UNA FLOR

    ResponderEliminar