domingo, 12 de junio de 2011
Taller Literario Personal 1D.
Última Versión
Náufrago En La Ciudad
Camino a lo largo de la avenida y creo que el mundo es el que avanza bajo mis pies, el asfalto es una banda transportadora. Esto ya lo había pensado antes.
El paisaje es una fábrica con chorros de humo y colinas de desperdicios. El proyecto de convertir la ciudad en un laberinto de concreto con túneles y puentes, ha abierto grietas en las entrañas de las calles del centro dejando al descubierto una tierra antigua, asfixiada.
Son las 4:15 de la tarde. Han dicho que la temporada de lluvias será atroz, sin embargo el sol palpita en el aire. Mi camisa amarilla relumbra. Pero aunque el clima se burle hoy de los meteorólogos, sabemos que el invierno se desbordará por encima de toda talanquera. Es como si un diluvio estuviese siendo entregado por cuotas.
La colina por la que desciendo rumbo a la estación del bus recibe una brisa que despeina los árboles y levanta una hojarasca tímida. Me veo obligado a entrecerrar los ojos, hay polvo. No oigo mis pasos ni mi respiración. Mi sordera está entrenada para borrar los aullidos metálicos de la urbe. Aún así no me siento a salvo, la voz de la ciudad me atemoriza. Cumplo mis rituales anhelando que algo bello ocurra.
Cruzo el puente sobre el río y veo aguas pardo jengibre gastar un cauce muy viejo trazado por su manera de fluir en el tiempo, por su imposibilidad de huir de su destino. Igual que el río, lo mejor sería ir a morir al mar junto con peces ahogados, matas desraizadas y este enorme sedimento de nostalgias que ni siquiera sirve de abono.
Mi cauce es la calle y mi rumbo una isla fuera de este naufragio de días.
anuar bolaños.
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Con una amigo y su esposa, entre los tres, hicimos una versión de Náufrago 1 en forma de minicuento y poema haciendo acopio máximo de la síntesis e incluso cambiando el final para no poner a la mujer o el amor como mesías ante la despersonificación que la modernidad causa en el personaje narrador convirtiéndolo en una especie de fantasma desolado que describa su hábitat y su cotidianidad.
ResponderEliminarLa redacción final de ambas versiones es de mi autoría.
Aquí van:
MINICUENTO NÁUFRAGO
Dejo la ciudad, laberinto de túneles, puentes y cráteres que se renueva a expensas de una tierra antigua, asfixiada. Al pasar por el río veo las aguas gastar un cauce muy viejo trazado por su manera de fluir en el tiempo, por su imposibilidad de huir de su destino. Lo mejor es ir a morir al mar junto con peces ahogados, matas desraizadas y sedimentos de nostalgia. Ya ni siquiera importa que una mujer me espere.
POEMA NÁUFRAGO
Dejo la ciudad,
laberinto de túneles, puentes y cráteres
que se renueva a expensas
de una tierra antigua, asfixiada.
Al pasar por el río
veo las aguas
gastar un cauce muy viejo
trazado por su manera
de fluir en el tiempo,
por su imposibilidad
de huir de su destino.
Lo mejor es ir a morir al mar
junto con peces ahogados,
matas desraizadas
y sedimentos de nostalgia.
Ya ni siquiera importa
que una mujer me espere.
ANUAR BOLAÑOS.
Y la mujer que espera? Por qué la sacaste del final?
ResponderEliminarPerdón, por mi ansiedad no vi tus aclaraciones al exponer mis preguntas. De todos modos y entendiendo tus razones, me gustaba más que una mujer te esperara al final. Porque, qué si no seres que esperamos el amor somos?
ResponderEliminarMaria Cristina, la explicación está en la foto y en mi propio comentario.
ResponderEliminarMaria Cristina, no entiendo la redacción de la última oración de tu segundo comentario.
ResponderEliminarPor favor, recuerda mis explicaciones anteriores dadas en este taller de 4 entregas. Náufrago 1 es tan sólo la primera parte de un cuento de 10 partes titulado "Librería Olvido". El personaje femenino vuelve a aparecer más adelante en la parte 4 de la versión final del cuento. Repito, Náufago 1 es sólo la introducción de la historia.
Ha sido muy interesante asistir en primera fila al proceso de creación de tus escritos, gran generosidad de tu parte.
ResponderEliminarAnuar he leído y releído todas tus entregas del taller literario, vi evolución, vi cómo ingresar conceptos, cómo transformar un texto con palabras simples y nuevas. Te digo que me encantó la expresión de que el asfalto es como una cinta transportadora, analizándo esa expresión, tienes razón, nosotros no nos desplazamos, simplemente nos lleva.
ResponderEliminarMe gustaría leer el cuento completo. Yo también espero a la mujer.
Besosssssssssssssssssssssssssssssssssss
de Norma Soriano
Gracias por tus explicaciones Anuar, yo tampoco entendí mi última frase ja ja ja, la enredé mucho. Pero lo que está claro es que sos un gran trabajador de las letras.
ResponderEliminar¿Qué tipo de seres somos sino esperamos el amor?
ResponderEliminar¿O si el amor no nos espera?
Hola Anuar: Sabes, sin amor nana somos.
ResponderEliminarAl fin quiero darte las gracias. Eres un artista de las letras está claro. Tratare de ir releyendo para entender mejor varias cosas. Gracias. Un abrazo y se feliz.
cuando llegues a tu isla, no olvides pedir un desván
ResponderEliminarSi me voy a sentir feliz de vivir en un pueblo...
ResponderEliminarBicos fermoso
Pilar, Norma, Marina, Shang, Carmela,
ResponderEliminarGracias por acudir.
anuar iván.
Querido Anuar, volveré mañana con las pilas puestas.
ResponderEliminarMazo de besos.
Andri
Muy buena explicación, a vez si algún día me aventuro a mandarte algunos de mis poemas para que me de tu opinión
ResponderEliminarUn beso mi querido amigo
Creo que ha sido un proceso concienzudo de depuración en el que la artesanía de tu creatividad se libera gratamente en la temática de tu creación. Me gustó mucho ver el proceso, conocer un poco más sobre ti a través de él, el como ves y sientes todo lo que te rodea. Lo que te limita, lo que envuelve, lo que hace que reflejes esa cotidianidad característica que te identifica y pasa a ser tu identidad, tu olor en tus textos.
ResponderEliminarUn beso, espero no haber farfullado, pues ya sabes que padezco de eso. Mi apoyo y mi cariño para ti.
Andri
Creo que ese orden que tú tienes, me faltará siempre, a menos que me empeñe en conseguirlo, pues soy muy visceral y a veces cuando escribo lo hago frente a la pantalla y no puedo meditarlo, los nervios y la rabia normal de la que padezco no me dejan tener esta gran paciencia, una gran virtud de la no me convenzo nunca de que puedo llegar a tener si me lo propongo.
ResponderEliminarENCUENTRO POESÍA EN CASI TODO Y EL CASI ES UN MARGEN REALMENTE CHIQUITITO, EL MÍO DE MARGEN. TODO ES SEGÚN EL COLOR DEL CRISTAL CON QUE SE MIRA.
ResponderEliminarBESOS.